El conflicto comercial entre Estados Unidos y la Unión Europea (UE) ha escalado nuevamente tras la decisión de la administración de Donald Trump de imponer aranceles del 25% a las importaciones de acero y aluminio. Como respuesta, la UE anunció medidas de represalia que podrían afectar exportaciones estadounidenses por un valor de hasta 26.000 millones de euros.

Mexconomy - La Comisión Europea condenó los nuevos aranceles de EE.UU., calificándolos de "injustificados" y "perturbadores del comercio transatlántico". Como parte de su estrategia de respuesta, el bloque europeo permitirá que expiren las contramedidas suspendidas en 2018 y 2020, dirigidas a productos estadounidenses que afectan a las exportaciones europeas de acero y aluminio.

Además, la UE anunció un nuevo paquete de medidas arancelarias dirigidas a sectores estratégicos de EE.UU. La lista incluye productos como soja, carne de vaca y pollo, así como motocicletas Harley-Davidson y artículos de electrodomésticos y herramientas. El objetivo, según la Comisión, es "golpear donde duele", afectando industrias clave en estados tradicionalmente republicanos.

El presidente Donald Trump respondió de inmediato a las medidas europeas, asegurando que "por supuesto habrá respuesta". Desde la Casa Blanca, Trump afirmó que la UE ha tratado "muy mal" a EE.UU. en términos comerciales y que su administración no permitirá que esta situación continúe.

Trump defendió su política arancelaria alegando que "si nos cobran el 25% o el 20%, nosotros haremos lo mismo", y sugirió que en algunos casos los aranceles estadounidenses superarán la reciprocidad para "compensar años de abusos".

La escalada comercial ha generado incertidumbre en los mercados financieros y preocupación a nivel global. El secretario general de la ONU, António Guterres, advirtió sobre los riesgos de una guerra comercial, subrayando que "en un mundo interconectado, nadie gana en un conflicto arancelario".

Mientras tanto, la UE ha reiterado su disposición al diálogo. La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, expresó su "profundo lamento" por la decisión de EE.UU. y enfatizó que las contramedidas europeas serán "fuertes pero proporcionadas". Además, dejó abierta la posibilidad de retirar los aranceles si se logra un acuerdo negociado.

Las contramedidas de la UE entrarán en vigor en dos fases: la primera comenzará el 1 de abril, cuando expiren las contramedidas previas, y la segunda se aplicará a partir del 13 de abril. Durante este tiempo, Bruselas mantendrá conversaciones con Washington para tratar de evitar una mayor escalada.

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