Estados Unidos impuso un arancel del 25% a los automóviles mexicanos, afectando especialmente a los modelos Tiguan y Jetta producidos en Puebla por Volkswagen de México. La dependencia del mercado de EE.UU. coloca a la armadora alemana en una posición más vulnerable que a las de origen estadounidense.

Mexconomy - Según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), el Tiguan fue el modelo más exportado en 2024 desde Puebla, con 151,245 unidades, de las cuales 90,886 (60%) se dirigieron a Estados Unidos. Esto lo ubicó en la posición número 12 de los vehículos mexicanos con mayor presencia en ese país.

En cuanto al Jetta, se enviaron 90,817 unidades al extranjero, con un 80.8% (73,462) destinadas a EE.UU., situándolo en el puesto número 16 en exportaciones hacia dicho mercado.

Este nuevo arancel podría provocar una disminución en la competitividad de ambos modelos y un alza en sus precios de entre 3,000 y 12,000 dólares, según estimaciones de Mexconomy. Esto afectaría las ventas y la estabilidad productiva en la planta de Puebla.

Otros modelos fabricados en México también enfrentarán impactos. En 2024, Volkswagen exportó 84,155 unidades de la Taos, con un 79.3% (66,790) dirigidas a Norteamérica. Audi, por su parte, exportó 143,783 camionetas Q5, de las cuales 55,846 (38.8%) ingresaron a EE.UU.

El gobierno mexicano ha manifestado su rechazo a la política arancelaria de EE.UU.. La Presidenta Claudia Sheinbaum declaró que la decisión unilateral de Donald Trump impacta a México severamente debido a la integración del sector automotriz en Norteamérica. Durante su conferencia matutina, señaló que el Tratado Comercial de México-Estados Unidos-Canadá (T-MEC) debería servir para la complementación económica y no para la competencia desleal.

Además, mencionó que empresas de capital estadounidense como General Motors, Ford y Stellantis también resultarán afectadas. No mencionó a la armadora alemana Volkswagen que reporta más problemas de integración que sus similares de origen norteamericano. El Secretario de Economía, Marcelo Ebrard, mantiene negociaciones con su homólogo estadounidense, Howard Lutnick, para buscar una solución antes del 2 de abril, fecha en que podrían anunciarse nuevos aranceles.

En Puebla, más allá del impacto directo en las marcas, la medida podría afectar a los proveedores de autopartes y componentes que abastecen a las plantas de la región, generando efectos en toda la cadena productiva del sector automotriz.