🌍⚠️ El mundo se encuentra en un punto de tensión sin precedentes 🗓️ Un alto funcionario ruso lanzó una advertencia contundente: permitir que Estados Unidos 🇺🇸 autorice ataques directos en territorio ruso 🇷🇺 podría desencadenar la Tercera Guerra Mundial 💥🔥
Moscú.- La declaración del primer vicepresidente del Comité de Asuntos Internacionales del Consejo de la Federación de Rusia, Vladimir Dzhabarov, ocurre tras reportes de medios como The Washington Post y The New York Times que señalan que el presidente estadounidense, Joe Biden, habría autorizado a Ucrania a emplear misiles de largo alcance suministrados por Washington para atacar objetivos dentro de Rusia.
Según estos informes, esta controvertida decisión sería una respuesta al supuesto despliegue de miles de militares norcoreanos que refuerzan la ofensiva rusa en el este de Ucrania. La presencia de estos combatientes se ha convertido en un nuevo capítulo en la escalada del conflicto, alimentando el temor de un enfrentamiento internacional de mayores proporciones.
“Es un paso muy grande hacia el comienzo de la Tercera Guerra Mundial, y los estadounidenses lo harán con las manos de un anciano jubilado que ya no será responsable de nada en dos meses”, expresó Dzhabarov, refiriéndose a Biden en términos despectivos durante una entrevista difundida por la agencia TASS.
El funcionario ruso también subrayó que Moscú no permanecerá inactivo ante este movimiento y prometió una respuesta inmediata por parte del Kremlin. “La respuesta de Rusia será inmediata”, aseveró con un tono alarmante que resonó en los principales titulares internacionales.
La autorización de ataques dentro de territorio ruso marca una nueva escalada en la estrategia de Estados Unidos y sus aliados en el conflicto de Ucrania, intensificando un enfrentamiento que ya ha costado miles de vidas y desestabilizado la región.
Mientras tanto, el Kremlin ha advertido repetidamente que considerará cualquier ataque en su territorio como una violación directa de su soberanía y una escalada hacia un conflicto global.
El mundo ahora observa con preocupación cada movimiento en este delicado tablero geopolítico. Un paso en falso podría arrastrar a las potencias mundiales a una confrontación de consecuencias catastróficas.
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