🇲🇽✨ Un cambio histórico en la judicatura de México: ⚖️ Ocho ministros rechazan someterse a 🗳️ votación popular y presentan sus renuncias ✍️
CDMX.- Este miércoles, 30 de octubre, el Senado de la República recibió las renuncias de ocho ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), quienes han decidido no participar en el proceso electoral de 2025, el cual, por primera vez, permitirá que los ciudadanos elijan a altos cargos del sistema judicial.
La presidenta de la Corte, Norma Piña, así como los ministros Luis María Aguilar Morales, Javier Laynez Potisek, Juan Luis González Alcántara Carrancá, Alberto Pérez Dayán, Ana Margarita Ríos Farjat, Jorge Mario Pardo Rebolledo y Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena, se cuentan entre quienes dejarán sus puestos en agosto de 2025.
La noticia fue confirmada por el presidente de la Mesa Directiva del Senado, Gerardo Fernández Noroña, quien anunció públicamente la recepción de las renuncias poco antes de las 11:30 horas.
"Acabamos de recibir, hace unos minutos, ocho renuncias de igual número de ministros y ministras de la SCJN",
escribió Noroña en redes sociales, resaltando la magnitud de este acontecimiento.
La Reforma Judicial y su Impacto
Las renuncias de los ministros son una respuesta directa a la reciente Reforma Judicial, la cual establece que en 2025 se llevará a cabo un proceso de votación sin precedentes en México, en el que los ciudadanos elegirán a jueces y magistrados para aproximadamente 1,600 cargos judiciales, entre ellos, los ministros de la Suprema Corte, magistrados del Tribunal Electoral Federal, magistrados de circuito, y jueces de distrito.
Esta reforma, impulsada como parte de un cambio hacia la “democratización” de la justicia, exige que los ministros participen en elecciones populares para legitimar su permanencia en el cargo.
La Reforma Judicial ha generado un intenso debate sobre la independencia judicial, pues en realidad plantea la posibilidad de que “Morena” tras el aparente apoyo popular, determine la permanencia de quienes ocuparán los más altos cargos en el Poder Judicial.
Para muchos de los ministros, este cambio representa un choque con el principio de independencia judicial, y han decidido optar por la renuncia antes que someterse a un proceso electoral.
Las Razones de los Ministros: Voces de Alfredo Gutiérrez y Ana Margarita Ríos Farjat
Dos de los ministros que presentaron su renuncia, Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena y Ana Margarita Ríos Farjat, compartieron cartas en redes sociales para explicar sus motivos. En su misiva, Gutiérrez Ortiz Mena destacó que, aunque tiene las capacidades necesarias para el cargo, no se considera "un candidato adecuado para un cargo que dependa del apoyo popular". Señaló que la función de la judicatura debe estar orientada a la protección de derechos, una labor que no debe depender de la "validación de las mayorías".
Por su parte, la ministra Ríos Farjat también expresó sus reservas sobre el nuevo modelo judicial y su incompatibilidad con el rol que, desde su perspectiva, deben desempeñar los jueces y magistrados.
Ambos destacaron la importancia de la independencia de la SCJN y manifestaron sus dudas sobre la efectividad y la justicia del nuevo proceso de selección mediante votación.
Repercusiones de las Renuncias
La renuncia de estos ministros representa un cambio profundo en la estructura judicial de México, ya que no solo implica la salida de figuras de alto perfil, sino que también simboliza un acto de protesta ante lo que muchos consideran una politización del Poder Judicial.
Los próximos meses serán cruciales para observar cómo responde el Senado ante estas vacantes y cómo los ciudadanos perciben esta nueva fase en la administración de justicia.
Este acto también podría tener implicaciones en la confianza de los inversionistas y en el entorno económico del país, ya que la independencia judicial es un pilar fundamental para la estabilidad institucional.
Con la “democratización” del sistema judicial en marcha, México entra en un territorio sin precedentes en el que los ciudadanos serán testigos de cómo evoluciona una nueva relación entre los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial.
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