En México, el conflicto entre ejidatarios y las autoridades gubernamentales no es un fenómeno nuevo. Sin embargo, el caso del Ejido Ignacio López Rayón en Tlahuapan, Puebla, se ha convertido en un caótico símbolo de resistencia en la búsqueda de justicia de miles de campesinos que se han visto obligados a esperar por años para recibir compensaciones justas por las tierras expropiadas para el desarrollo de infraestructuras públicas.

Este reportaje explora los detalles de esta lucha y las complejidades legales y sociales que la rodean.

Santa Rita Tlahuapan, Pue.- Desde hace décadas, los ejidatarios de varias regiones de México han sido afectados por la construcción de infraestructuras públicas, como autopistas, parques nacionales y gasoductos. En muchos casos, estas construcciones se llevaron a cabo sin una indemnización justa oportuna para los dueños de las tierras.

El caso del Ejido Ignacio López Rayón, ubicado en el municipio de Santa Rita Tlahuapan, Puebla, es un ejemplo de esta problemática.

El representante legal de los ejidatarios, Jorge Portillo Alba, señala que los hoy inconformes de Tlahuapan han luchado por más de diez años para obtener una sentencia favorable que obligue al gobierno a cumplir con las indemnizaciones prometidas.

En este caso, la construcción de la autopista México-Puebla, que afecta a 41 hectáreas de este ejido, se realizó hace 62 años, en 1962. Sin embargo, la compensación justa por la expropiación de estas tierras aún no se ha materializado.

Confusión en los Medios

Uno de los obstáculos que enfrentan los ejidatarios en su lucha es la desinformación. Ha habido confusión en algunos medios de comunicación que han señalado erróneamente que la protesta está ocurriendo en el Ejido Santa Rita Tlahuapan, cuando en realidad se trata del Ejido Ignacio López Rayón.

Esta confusión no solo desvía la atención de la causa, sino que también ha dado espacio a medios para difundir información incorrecta.

El portavoz del movimiento, ha sido claro al señalar la importancia de corregir estos errores para asegurar que la protesta reciba la atención adecuada y que se comprenda la magnitud de la afectación que han sufrido los ejidatarios. "Este no es un caso aislado, sino parte de una problemática más amplia que afecta a cientos de ejidos en todo el país," explicó el representante de los ejidatarios este día minutos antes de la apertura intermitente de la Autopista Puebla - CDMX.

El Camino Legal: Larga Espera por Justicia

El proceso legal para obtener la compensación por las tierras expropiadas ha sido largo y tortuoso. Los ejidatarios del Ejido Ignacio López Rayón iniciaron su litigio hace aproximadamente diez años. Aunque han obtenido una sentencia favorable en el Tribunal Agrario, la cual fue confirmada por el Tribunal Colegiado, el pago de la indemnización aún no se ha realizado.

"La sentencia adquirió definitividad hace año y medio, y a pesar de los múltiples requerimientos del tribunal agrario, la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) no ha cumplido con la sentencia," explicaron. Esta falta de cumplimiento no solo representa una violación de los derechos de los ejidatarios, sino también una falta de respeto hacia el sistema judicial del país.

La situación es similar para otros ejidos afectados, como los de San Antonio Calpulalpan, Estado de México, y Emiliano Zapata, Hidalgo, que también han esperado por años para recibir sus compensaciones. En promedio, los juicios han durado 10 años, con algunos casos extendiéndose hasta 15 años. Sin embargo, el común denominador es que ninguno de los ejidos ha recibido el pago indemnizatorio respectivo.

El problema de las expropiaciones no compensadas afecta a múltiples ejidos.

  • Autopista Arco Norte: Afecta a los ejidatarios de Francisco I. Madero en el Estado de México, así como a San Antonio Calpulalpan en Tlaxcala. Este tramo carretero ha sido objeto de protestas debido a la falta de compensación por la afectación de las tierras ejidales.
  • Parque Nacional Popocatépetl-Iztaccíhuatl: La creación de este parque nacional afectó a varios ejidos, incluyendo Ignacio López Rayón, Cuauhtémoc, San Martinito y San Pedro Matamoros. Estos ejidos han estado luchando por una compensación desde 1935, cuando se estableció el parque.
  • Gasoductos y Petróleos Mexicanos (Pemex): En el municipio de Axapusco, Estado de México, el Ejido Francisco I. Madero fue afectado por instalaciones de Pemex, que aún no han sido indemnizadas, a pesar de contar con una sentencia firme que obliga a la paraestatal al pago correspondiente.
  • Libramiento Apizaco-Huamantla: Este libramiento en Tlaxcala ha afectado al Ejido Santa María Texcalac, que también ha estado esperando una compensación justa por el uso de sus tierras.

El total de hectáreas afectadas por estos proyectos asciende a más de 120, y el número de personas involucradas se estima en alrededor de 10,000, considerando los diversos núcleos agrarios.

El Dilema de la Protesta

A pesar de la legitimidad de su causa, las manifestaciones han generado afectaciones colaterales, especialmente para transportistas y ciudadanos que transitan por las vías bloqueadas. Sin embargo, los ejidatarios han intentado mitigar estas afectaciones ofreciendo asistencia a los afectados, como agua y alimentos.

"No es nuestra intención perjudicar a los ciudadanos. Estamos dispuestos a dialogar y encontrar soluciones que beneficien a todas las partes involucradas," añadieron los manifestantes este día.

Para los ejidatarios, la tierra no es solo un recurso económico, sino una parte integral de su identidad y sustento.

"Hemos sido pacientes, pero la espera ha sido larga. Exigimos que se respeten nuestros derechos y se nos compense justamente por las tierras que nos fueron arrebatadas," exigen los representantes ejidales.

El caso del Ejido Ignacio López Rayón y otros similares destaca la necesidad urgente de que el gobierno mexicano revise y mejore sus políticas de expropiación y compensación. La justicia tardía es, en muchos casos, justicia negada, y la demora en el cumplimiento de las sentencias judiciales es una muestra de la falta de compromiso con los derechos de los expropiados.

El Futuro del Conflicto

A pesar de los desafíos, los ejidatarios mantienen la esperanza de que su lucha finalmente dará frutos. Han reiterado su disposición al diálogo y su deseo de encontrar una solución pacífica que satisfaga a todas las partes involucradas.

"Nuestro objetivo no es confrontar, sino resolver. Estamos abiertos al diálogo y dispuestos a trabajar con las autoridades para encontrar una solución justa," concluyeron este día.

Mientras tanto los cierres intermitentes continuarán afectando a los diferentes puntos críticos donde nuevamente se han reportado bloqueos:

  • Km 182 del Arco Norte en la caseta de Calpulalpan.
  • Caseta de Zacatelco y altura de Ciudad Judicial en Tlaxcala.
  • Autopista México-Puebla en el km 74.
  • Autopista Tlaxco-Tejocotal a la altura de Chignahuapan.

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