🌐 Déficit, deuda y decisiones financieras: el panorama de México en 2024 ¿Es sostenible el camino que sigue el país? Aquí te presentamos una mirada diferente, derivada de los datos oficiales pero con rigor exhaustivo 📉💰 #Economía #México

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El déficit y la deuda son temas críticos para cualquier economía. Por décadas, en México, estos factores han sido objeto de intensos debates que en los últimos años han derivado en la descalificación fácil, sin una visión concluyente sobre su importancia en la economía del país. Aquí dejamos fuera el uso de etiquetas como “neoliberal”, “conservador”, “populismo” y otras más, para centrarnos en el significado económico de los indicadores y sus números.

Al cierre de junio de 2024, las cifras oficiales pintan un cuadro complejo. Aunque el déficit presupuestario y el déficit primario se encuentran por debajo de lo programado, y la deuda pública sigue una "trayectoria sostenible", un análisis más profundo revela preocupaciones subyacentes que requieren una atención urgente.

Examinamos los datos más recientes y planteamos preguntas sobre la gestión financiera del país, sus implicaciones para el futuro, y las decisiones que deberán tomarse para asegurar un crecimiento económico equilibrado y sostenible.

El Déficit: Más Allá de las Cifras

Al cierre de junio, el déficit presupuestario de México alcanzó los 744 mil millones de pesos, situándose 57 mil millones por debajo de lo programado. De manera similar, el déficit primario presupuestario fue de 136 mil millones de pesos, 21 mil millones menos de lo esperado. Aunque estas cifras parecen indicar un control efectivo del gasto público, la realidad es que aún existe un considerable déficit, que plantea interrogantes sobre la sostenibilidad fiscal a largo plazo.

La narrativa oficial celebra el hecho de que los Requerimientos Financieros del Sector Público (RFSP) alcanzaron 821 mil millones de pesos, argumentando que esto demuestra una gestión financiera prudente. Sin embargo, este enfoque optimista podría estar pasando por alto la magnitud del problema y sus consecuencias para la economía mexicana. La atención se ha centrado en las cifras absolutas, dejando de lado la discusión sobre la eficiencia del gasto y la verdadera capacidad del Estado para financiar sus compromisos sin recurrir a medidas fiscales restrictivas en el futuro.

Deuda Pública: ¿Es Realmente Sostenible?

La deuda pública en México es un tema de preocupación creciente. El Saldo Histórico de los Requerimientos Financieros del Sector Público (SHRFSP) se situó al cierre del segundo trimestre del año en 16 billones 30 mil 700.7 millones de pesos, equivalente al 47.2% del PIB. Este porcentaje, aunque manejable en comparación con otros países de la región, sugiere una dependencia significativa del endeudamiento para sostener el gasto público.

La deuda neta del Gobierno Federal asciende a 13 billones 987 mil 877.8 millones de pesos, de los cuales el 83.9% está en el mercado interno, con un 76.8% a tasa fija y vencimientos a largo plazo. Aunque esta estructura aparentemente reduce la exposición a las fluctuaciones del mercado internacional, plantea preguntas sobre la capacidad del mercado interno para absorber deuda de manera continua sin generar presiones inflacionarias o distorsiones económicas. Además, la sostenibilidad de esta estrategia a largo plazo depende de una estabilidad económica que no siempre está garantizada.

Estrategias de Financiamiento: Simple Apariencia

Durante el segundo trimestre de 2024, el gobierno mexicano ha implementado varias operaciones en el mercado interno con el objetivo de "optimizar" su perfil de deuda. Entre las más destacadas se encuentra el intercambio cruzado de Bonos M y Udibonos por 81 mil 731 millones de pesos el 26 de abril, y la emisión de Bondes G por 25 mil millones de pesos el 13 de mayo. Este último, se presentó como un hito en finanzas sostenibles, orientado a proyectos de combate a las desigualdades sociales y el cambio climático.

A pesar de la apariencia positiva de estas iniciativas, el enfoque del gobierno en operaciones de refinanciamiento es sólo un intento de posponer los problemas financieros en lugar de abordarlos de manera estructural. Las operaciones sindicadas y los intercambios cruzados, como el realizado el 20 de mayo por 29 mil 711 millones de pesos, se han utilizado para dar "mayor liquidez" a ciertas emisiones, pero también reflejan una estrategia de manejo de deuda que puede estar enfocada más en el corto plazo que en soluciones de fondo.

Perfil de Vencimiento: Preocupación Creciente

El 13 de junio, el gobierno llevó a cabo la recompra de Cetes, Bonos y Udibonos, colocando Bondes F y Udibonos con un refinanciamiento total de 181 mil 754 millones de pesos. Esta operación se presentó como una medida para suavizar el perfil de vencimiento, retirando 136 mil 863 millones de pesos en instrumentos que vencían en 2025. Además, en el ámbito internacional, se anunció una operación de vencimiento anticipado por 894 millones de dólares para aliviar las obligaciones futuras.

A pesar de estas medidas, el constante refinanciamiento y la extensión de vencimientos en realidad son parches temporales a un problema estructural más profundo. El enfoque en la gestión del perfil de vencimiento da una falsa sensación de control, mientras que los problemas subyacentes de sostenibilidad fiscal y crecimiento económico equilibrado persisten.

El Futuro: La Trampa de Deuda

La situación financiera de México en 2024 plantea serias preguntas sobre el camino que se está tomando. Aunque el gobierno ha afirmado que todas las colocaciones de deuda están enmarcadas en el Plan Anual de Financiamiento y cumplen con la Ley Federal de Deuda Pública, la realidad es que las cifras continúan mostrando una dependencia preocupante del endeudamiento para sostener el crecimiento económico.

El enfoque oficial en las cifras de deuda y déficit son una máscara que oculta problemas estructurales que requieren atención urgente. La sostenibilidad de la deuda, el crecimiento económico, y los programas sociales se han amarrado peligrosamente. Cae un factor y los demás se vienen abajo también. Estamos camino a una trampa de deuda que ya limita la capacidad del país para invertir en desarrollo social y económico para el futuro.

Regresar a los Fundamentos: La Necesidad de un Enfoque Estratégico y Sostenible

Mientras que las cifras oficiales sugieren que México está manejando su déficit y deuda de manera responsable, más a fondo se observan riesgos que no deben ser ignorados: La dependencia del endeudamiento; las estrategias de refinanciamiento a corto plazo; y la falta de un enfoque en la eficiencia del gasto y la inversión social, son temas que necesitan una revisión cuidadosa.

El futuro financiero de México depende de la capacidad del futuro gobierno de Claudia Sheinbaum para instrumentar políticas que promuevan un crecimiento económico equilibrado, sostenido por una base fiscal sólida y un compromiso real con la equidad social. Solo entonces podrá el país avanzar, evitando las trampas que una gestión inadecuada de la deuda podría imponer.

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