El final del sexenio de Andrés Manuel López Obrador deja un legado económico marcado por la incertidumbre y la falta de crecimiento. ¿Qué nos depara el futuro? 📉🇲🇽
Al final del mandato de Andrés Manuel López Obrador, México enfrenta un panorama económico complejo y preocupante.
El Informe Trimestral del Banco de México, correspondiente al periodo de abril a junio de 2024, refleja los desafíos acumulados a lo largo de su sexenio, subrayando una economía débil que ha luchado por mantener el crecimiento y controlar la inflación en un entorno cada vez más volátil.
A lo largo de su administración, López Obrador prometió transformaciones profundas para México, pero los últimos datos económicos revelan una realidad distinta. La economía mexicana ha mostrado una debilidad persistente, en medio de la desaceleración global y factores internos críticos, que han impedido un crecimiento sostenible.
El sector industrial y de servicios, pilares fundamentales para la economía nacional, han experimentado una notable atonía, reflejando la incapacidad del gobierno para reactivar estas áreas clave.
La inflación, un problema constante durante el sexenio, ha sido otro reto significativo.
A pesar de las políticas monetarias restrictivas implementadas por el Banco de México, la inflación general se ha mantenido elevada, impulsada por incrementos en los precios de los energéticos y productos agropecuarios. Este hecho subraya la dificultad del gobierno de AMLO para enfrentar eficazmente los choques externos que han impactado la economía.
La meta inflacionaria del 3%, prevista para 2025, parece cada vez más distante, lo que genera incertidumbre sobre la estabilidad económica futura.
Las decisiones de política monetaria tomadas en los últimos meses del sexenio reflejan la complejidad de la situación económica. A pesar de pausar las reducciones en la tasa de referencia en mayo y junio, y realizar un ajuste menor en agosto, la economía mexicana no ha mostrado señales de una recuperación robusta.
Este estancamiento económico, combinado con una desaceleración en la creación de empleo formal, sugiere que el país enfrenta un estancamiento profundo que requerirá más que medidas monetarias para ser superado.
López Obrador dejó un país donde la incertidumbre económica es palpable. Las proyecciones de crecimiento para 2024 y 2025 han sido revisadas a la baja, y el balance de riesgos sigue sesgado en contra del crecimiento.
A pesar de los esfuerzos por mantener la disciplina fiscal y la estabilidad financiera, la falta de dinamismo en la inversión y el consumo durante su administración ha dejado a la economía mexicana en una posición vulnerable.Con el fin del sexenio de AMLO, México se encuentra en una encrucijada crítica.
La política económica implementada durante estos seis años ha demostrado ser insuficiente para impulsar un crecimiento sostenido, y el país ahora se enfrenta a la tarea monumental de reconstruir su economía.
La pregunta que queda en el aire es si el próximo gobierno podrá revertir esta tendencia y llevar a México hacia un futuro más próspero cuando el tipo de cambio alcanza niveles cercanos a 20 pesos por un dólar estadounidense, en medio de una agenda legislativa que ha generado ya agitación política y problemas diplomáticos con nuestro principal socio comercial, los EE. UU..
Opinión elaborada con base en: Informe Trimestral del Banco de México, Abril - Junio 2024
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