🚨 @MovCiudadanoMX: Lo que mal comienza, mal termina. Tras el derrumbe en San Pedro Garza García que dejó 9 muertos y 120> heridos, la responsabilidad recae en @samuel_garcias. La ambición de Dante-Samuel-@AlvarezMaynez quedó exhibida. MC pierde el 50% de su preferencia electoral en 3 días 😞

Horacio De la Cruz S.

| @hcsblog

Con honrosas excepciones, un político primero se traiciona a sí mismo; luego, traiciona a todos los demás. Gran parte de estos personajes, que en temporada electoral les llaman chapulines, así van por la vida: “reinventándose”, dicen.

En el mismo sentido, hay partidos políticos que surgieron y viven de la traición (o la mentira, que es la otra cara de la misma moneda). Es el caso de Movimiento Ciudadano, un partido sometido a la voluntad y los intereses de un solo hombre de la “vieja política”: Dante Delgado Rannauro.

Resurgimiento

A Dante, su priismo y su ascendencia veracruzana le sonrieron y fue gobernador interino de su estado natal de 1988 a 1992, tras la renuncia de Don Fernando Gutiérrez Barrios al cargo de gobernador de Veracruz para ser el Secretario de Gobernación del presidente Carlos Salinas de Gortari.

Con Ernesto Zedillo en la presidencia, a Dante no le fue nada bien: apenas iniciado el sexenio, fue sometido a proceso y encarcelado bajo la acusación de desviar 450 millones de pesos del presupuesto público de Veracruz. Se dijo perseguido político desde el penal de Pacho Viejo, en Coatepec, Veracruz, y desde ahí caviló su siguiente parada.

Dante andaba en eso de su reincorporación a la vida política y coincidí con él en 1995 en una comida de medios y políticos. Subimos escaleras, me tomó del brazo para apoyarse y estaba sonriente. Vestía elegante: un traje color caqui de algodón ligero y una camisa azul cielo, sin corbata. Con expresiones de buen político veracruzano, le vi abrazar a cuantos priistas y periodistas pudo, entre ellos Manlio Fabio Beltrones.

Era el mismo Dante de siempre. Ahí me enteré que la renuncia al PRI estaba encaminada a iniciar una nueva travesía: la conformación de un nuevo partido político que, después de casi dos años de trabajo, tramitología y reuniones, cobraría forma de Partido Convergencia, más tarde Movimiento Ciudadano.

Consolidación

Las cosas le salieron bien. Tras salir del penal de Pacho Viejo, soltó la mano de Carlos Salinas, al fin y al cabo su carrera en el PRI había terminado, y tomó la de Andrés Manuel López Obrador, ya entonces dedicado a gobernar la Ciudad de México y destruir desde dentro al PRD.

El 2 de julio de 2006, Dante se alzó como primer senador de mayoría por la circunscripción de Veracruz, su tierra, por el Partido Convergencia. Más tarde, Delgado Rannauro modificó el nombre y los estatutos de ‘su partido’ y surgió Movimiento Ciudadano (MC), en el que se aseguró ser coordinador y dirigente nacional por siempre. Al mismo tiempo, fortaleció su alianza política con Andrés Manuel López Obrador, a quien, de facto, nunca ha soltado.

Hábil político, conquistó a Enrique Alfaro Ramírez y, tras dividir localmente al PRI, MC se hizo del gobierno de Jalisco. Lo mismo ocurrió en Nuevo León, donde fichó a dos activos políticos jóvenes: Luis Donaldo Colosio Riojas y Samuel García.

Tragedia

Llegó la sucesión presidencial en turno, pero los problemas factureros de Samuel García, disfrazados de un enfrentamiento con el PRIAN (como él nombra a la oposición), le hicieron recular en su intento de ser el candidato presidencial de MC.

Surgió Jorge Álvarez Máynez. La buena fortuna de Dante le ha llevado a soñar con que MC puede evolucionar de partido bisagra a segunda fuerza política nacional. Ha jugado a capricho con Máynez quien, conforme ha transcurrido el tiempo, deja en claro que el objetivo real de MC es sabotear a la oposición y facilitarle el triunfo a Claudia Sheinbaum, candidata del partido Morena de Andrés Manuel López Obrador.

Pero el destino ha jugado en contra de la triada Dante-Samuel-Máynez. El derrumbe de la estructura metálica del evento proselitista de MC en San Pedro Garza García, el pasado 22 de mayo, lamentablemente dejó un saldo de nueve vidas perdidas y más de 120 heridos. La responsabilidad es de Samuel García, no solo por negligencia criminal como gobernador y responsable de Protección Civil de Nuevo León, sino también porque ha sido el patrocinador de la actividad proselitista de Jorge Álvarez Máynez, incluido el fatal mitin político de San Pedro Garza García.

El sueño de Dante-Samuel-Máynez terminó. Al 22 de mayo, día del siniestro, MC llegó a contar con una preferencia electoral de alrededor de 20 puntos. Han pasado tres días y MC sigue sin asumir una respuesta clara sobre su responsabilidad, pero el electorado ya reaccionó y se aleja de este partido tan rápido como Máynez corrió del lugar donde el montículo de fierros se vino abajo.

La preferencia electoral de MC ha caído en tres días un 50%. Máynez a duras penas sostiene 10 de los 20 puntos que le otorgan ciudadanos despistados.

Consecuencias

Lamentablemente, la muerte de nueve personas ha puesto a MC en su lugar. Queda descubierta la ambición política de Dante Delgado Rannauro haciendo el trabajo sucio a Andrés Manuel López Obrador a favor de Claudia Sheinbaum y en contra de la oposición.

Queda exhibido un gobernador (el de Nuevo León) con una cola más larga que los dinosaurios del PRI.

De igual manera va desnuda la ambición de un joven político al que le fastidia la gente, le encanta el poder, pero le persigue la mala suerte: Jorge Álvarez Máynez.

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