🗳️ ¿En qué México vives? 🌎 En medio de un panorama político donde la realidad se desvanece y las promesas suenan huecas, es crucial abrir los ojos 👀 💡 En esta opinión exploramos cómo la pobreza, en todas sus formas, afecta a millones en México 🇲🇽 y cómo tu voto cuenta en medio de inconvenientes 💪 🗣️✊

Horacio De la Cruz S.

| @hcsblog

Si usted es como Ciro Gómez Leyva, que después de leer El Financiero cree que la economía mexicana va “muy bien”, entonces vive en otro mundo. El INEGI alertó de la caída del sector manufacturero e industrial, pero no se le da mayor importancia. ¡Qué fastidio hablar de la pérdida de competitividad, innovación y rezago del sector formal de la economía!

Pero si es ciudadano medianamente informado, de a pie o con un auto modesto, sabe que sucesivamente los gobiernos del PRI, PAN y Morena le han empobrecido y restado oportunidades a usted y a su familia. “Es de que dice ANLO qué no son iguales”. Medite un poco, y tal vez llegue a la conclusión de que unos son peores que otros, no más, no menos.

Si no se da cuenta, a pesar de revisar su pasado reciente, tal vez le hayan recetado el Windows, le instalaron el malware del fanatismo y todo pasa desapercibido para su raciocinio. Esto quiere decir que, de alguna manera, le empobrecieron y recuerde que la pobreza se manifiesta de múltiples formas extendiéndose más allá de la simple falta de recursos económicos.

Le explico: Además de la pobreza material, que se refleja en la escasez de alimentos, vivienda inadecuada y acceso limitado a servicios básicos, tenemos muy extendida ya la pobreza educativa, donde la falta de acceso a una educación de calidad perpetúa el ciclo de ignorancia - pobreza y falta de sentido común.

Hay otros tipos de pobreza, como la pobreza de salud que se traduce en la incapacidad de acceder a una atención médica adecuada y a condiciones sanitarias básicas además de la falta de tratamientos y medicinas. Son más de 50 millones de personas las afectadas en México.

Existen, además, otras formas de pobreza que, después de la pandemia por COVID-19, han cobrado relevancia: como la pobreza emocional, que se refiere a los problemas de salud mental, la violencia y la normalización de un ambiente social criminal que tiene a un buen número de personas (millones) afectadas en México.

Si cualquiera de estas u otras formas de pobreza le sucede, le afecta, a usted, a algún miembro de su familia o amistad, y aún así piensa que su victimario -el gobernante en turno- es “bueno”, y llega al extremo de darle las gracias a su ‘verdugo’, bueno pues ya ni hablar.

En caso contrario, le sugiero: Observe lo que ocurre con los candidatos, candidatas y candidates. Despierte, infórmese y actúe racionalmente. Por supuesto que no le estoy pidiendo votar por tal o cual propuesta o partido. De ninguna manera. Lo que le sugiero es que escoja entre inconvenientes porque nadie, por más programas sociales que le prometan y se inscriba, le va a dar una alternativa de vida sostenible y digna. Eso depende de cada quien y más en un México violento y con un Estado en ruinas.

Lo que le sugiero es que use el poder de su voto para que sientan la presión social y, como dicen por aquí, “le midan el agua a los tamales”. Vote por quien le parezca la mejor opción, pero nada de “vota todo por…” Nada de eso, si puede, no se comporte como una mascota. ¡Usted es muchísimo más que eso!

No se engañe con el cuento de que el candidato(a) es su amigo(a). Ya instalados en el poder van por lo suyo y son parte de un Estado. Es decir, forman parte de entidades edificadas para cobrar impuestos y controlar de las más diversas maneras. Cuando el gobierno no es suficiente, surge el ‘crimen organizado’ en las calles y recorren impunemente caminos y pueblos porque sirven a algún propósito del gobernante en turno.

Usted, con su voto, sabe a quién le da el poder de ponerle una soga al cuello -o quitarla- durante los siguientes años. Pero no crea que tiene muchas oportunidades. A lo largo de su vida, si bien le va, sólo podrá votar por 9 gobernantes sexenales ya sean presidentes, gobernadores o senadores y 18 diputados (locales, federales) y alcaldes.

Por ahora sólo hay dos sopas. Comer pan con lo mismo, o pan con lo que ya sabe, tal vez un poco mejorado (si se logra el propósito de formar un gobierno de coalición y que ningún partido -o coalición- tenga mayoría en el Congreso de la Unión). Al decidir su voto, no sólo mire a los candidatos. Mire a su familia, a sus hijos, hermanos, padres, y decida en consecuencia.

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