Es común referirse a líderes de la independencia mexicana, como Miguel Hidalgo, José María Morelos, Vicente Guerrero, Agustín de Iturbide, entre otros, como “Los padres de la Patria”, por su papel crucial en la lucha por la independencia de México del dominio español.

En el caso de los Senadores de la República, el título de "Los padres de la Patria" se les asigna como una forma de reconocimiento y respeto por su contribución al desarrollo del país, su participación en la construcción de instituciones y su papel en la toma de decisiones legislativas.

Pues bien, Alejandro Armenta, como Senador de la República y, más allá de regateos miserables a su trabajo político, se ha ganado un lugar en la política mexicana conduciendo eficientemente reformas fundamentales desde la presidencia de la mesa directiva del Senado de la República en la LXV legislatura del Congreso de la Unión, desde el 1 de septiembre de 2022 hasta el 1 de septiembre de 2023 .

Ese lugar le fue reconocido recientemente al ser nombrado virtual candidato al gobierno del estado de Puebla, por el factor real de poder en Morena, quien más allá del “no robar, no mentir y no traicionar”, sabe que de lo que se trata la “Cuarta Transformación”, es de edificar un “Nuevo Estado Mexicano”.

Andrés Manuel López Obrador, sabe que en México si existe un “Estado Profundo”, lo sufrió, lo enfrentó y lo está moldeando conforme sus posibilidades. Eso explica su relación con el Ejército, su enfrentamiento con la Suprema Corte de Justicia y el papel de Claudia Sheinbaum en la sucesión presidencial.

Alejandro Armenta, como Senador de la República, también lo sabe. De ahí que cada vez que ha reiterado su lealtad a la 4T, el mensaje tiene eco en Claudia Sheinbaum y en Palacio Nacional. Más todavía, se asegura que quede muy claro que no pertenece a ningún pasado, que no forma parte de ningún grupo aldeano en Puebla y que su lealtad está con lo que algunos llaman superficialmente “movimiento obradorista”.

Pero Alejandro va más allá, ve más lejos, porque ha sido parte -desde el Senado- en la construcción del “Nuevo Estado Mexicano”.

Esto explica el motivo verdadero de su reunión con Manuel Bartlett Díaz, ex gobernador de Puebla, pero -sobre todo- personaje fundamental en la transición del viejo “Estado Profundo” al “Nuevo Estado Mexicano”.

Bartlett, lo dice la historia del México contemporáneo, conoce como nadie las entidades poderosas que operan bajo la superficie de la democracia y el gobierno. Manuel Bartlett Díaz, hombre principalísimo en la estrategia política presidencial, ha sido un actor clave -tal vez el más importante, vivo- en la trama oculta de influencia y control que se ejerce sobre el gobierno federal, las entidades federativas y más allá de lo oficial.

Bartlett, hace casi 50 años que actúa en la inteligencia, la seguridad y el gobierno de México. No hay nadie vivo que compita con su experiencia.

Con él se reunió Alejando Armenta, con el artífice del viejo "Estado Profundo" y arquitecto fundamental del “Nuevo Estado Mexicano” y que el presidente Andrés Manuel López Obrador bautizó como “Cuarta Transformación”.

Alejandro Armenta, no puede desaprovechar la oportunidad que se ha ganado a pulso de gobernar Puebla. La vida le da la oportunidad de ser protagonista y contribuir a ese “Nuevo Estado Mexicano” junto con otros personajes que todos los días ponen ladrillos sobre ese cimiento que se llama Andrés Manuel López Obrador.

Horacio De la Cruz S. | Twitter: @hcsblog | HCSblog