Un reciente informe sobre los contratos en la refinería de Dos Bocas ha arrojado luz sobre un tema preocupante: la falta de transparencia en la asignación de contratos y la participación de un nombre polémico en el proceso.

Ciudad de México.- Leonardo Cornejo Serrano, una figura conocida por su participación en el escándalo de sobornos relacionado con la empresa Odebrecht durante el sexenio de Enrique Peña Nieto, ha resurgido en la esfera pública debido a su papel en la refinería de Dos Bocas.

Cornejo ha firmado el 99 por ciento de los 201 contratos otorgados en esta obra, según información disponible, pero lo que ha llamado la atención es la opacidad que rodea a estos contratos.

De los 201 contratos revisados por la organización Mexicanos contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI), casi todos ellos están marcados por la tinta negra, lo que significa que se han ocultado los montos pagados a los contratistas. Esto plantea interrogantes fundamentales sobre la transparencia en el manejo de los recursos públicos en una de las obras insignia del Gobierno federal.

La inversión total en la refinería de Dos Bocas asciende hasta ahora a la asombrosa cifra de 16 mil millones de dólares, lo que representa el doble de la proyección inicial de 8 mil millones de dólares. Sin embargo, la falta de claridad en los montos de los contratos dificulta la evaluación de si estos fondos se están utilizando de manera eficiente y efectiva para la construcción de la refinería.

De los pocos contratos que se han hecho públicos, tres de ellos representan solo el 0.3 por ciento de la inversión total en la refinería. Estos contratos incluyen acuerdos con empresas como Thermax Babcock & Wilcox Energy Solutions Private Limited, Siemens Gas and Power, y Worley Nederland B.V., que suman una inversión de varios millones de dólares para la adquisición de equipos y servicios técnicos.

Sin embargo, la opacidad prevalece en la mayoría de los contratos, y esto plantea preocupaciones legítimas sobre la posible falta de rendición de cuentas y la perpetuación de prácticas cuestionables en el manejo de recursos públicos.

Entre los contratos censurados se encuentran cuatro asignados a Baker Hughes, una multinacional de servicios petroleros previamente relacionada con el escándalo conocido como "La Casa Gris", vinculado al hijo mayor del presidente de México.

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