Se cierne una crisis sobre la producción petrolera en México, derivada de una marcada disminución en los campos más importantes operados por Petróleos Mexicanos (Pemex) y la fragilidad financiera de la paraestatal.

Ciudad de México.- La Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH) comenzó a reportar la producción de campos de todos los operadores en 2016, tras la reforma energética, y desde entonces, la producción de los campos Ku, Maloob y Zaap ha disminuido en un 41%, mientras que Cantarell ha caído un 37.8%. Estos campos, ubicados en la Sonda de Campeche, han sido históricamente cruciales para la producción petrolera de México.

Cantarell, en su apogeo, produjo dos millones de barriles de petróleo por día hace dos décadas. Hoy en día, su producción se ha reducido drásticamente a 145,583 barriles diarios. Ku Maloob Zaap, que incluye los campos Ku, Maloob y Zaap, ha pasado de 841,094 barriles diarios en enero de 2016 a 495,090 barriles diarios en julio de este año. Ku ha experimentado la mayor disminución, con una caída del 89% en su producción, alcanzando apenas 19,194 barriles por día. Zaap ha visto una reducción del 37% desde 2016, con una producción de 181,911 barriles diarios. Maloob, el campo más productivo actualmente, ha disminuido un 22% desde enero de 2016 y produce 293,985 barriles diarios.

Para contrarrestar esta tendencia a la baja, Pemex ha presentado un plan de desarrollo que implica una inversión de 14,166 millones de dólares para extraer 555.5 millones de barriles de petróleo crudo en el campo Maloob, en el Golfo de México. Sin embargo, algo tendrá que hacer Octavio Romero, director general de Pemex, ya que este plan se enfrenta a desafíos considerables, y su viabilidad es cuestionada por expertos y organismos internacionales como la Agencia Internacional de Energía (IEA).

El gobierno federal busca reemplazar la producción de estos campos mediante el desarrollo acelerado de otros "campos prioritarios". Sin embargo, la IEA estima que la extracción de estos campos alcanzará su punto máximo en poco más de 400,000 barriles en 2024, para luego mantenerse durante dos años antes de iniciar una declinación natural de los recursos. Esto podría requerir métodos secundarios, como la inyección de gases en los pozos para aumentar la presión, similar a lo que sucedió con Cantarell y se realiza en Ku Maloob Zaap.

Entre los campos prioritarios se destaca el desarrollo del campo Zama, descubierto por la empresa estadounidense Talos Energy, con recursos estimados en alrededor de 800 millones de barriles de crudo. Pemex será el operador principal debido a su proximidad a una asignación previamente desarrollada por la empresa estatal.

Hasta julio de este año, la producción nacional de crudo, incluyendo condensados, promedió 1.944 millones de barriles diarios, según datos de la CNH y Pemex.

Estos números reflejan la urgencia de abordar los desafíos en la industria petrolera de México y la necesidad de buscar alternativas para garantizar un suministro de energía sostenible en el futuro.

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