La ola de calor que azota al país ha llevado al Centro Nacional de Control de Energía (Cenace) a declarar un "estado operativo de alerta" en el sistema eléctrico, lo que implica la implementación de apagones programados para hacer frente a la alta demanda de electricidad.
CDMX.- Estos cortes de energía ya se están experimentando en diversas ciudades del norte, occidente y sur del país, generando serias afectaciones en los servicios públicos.
En un comunicado emitido anoche, Cenace advirtió que el "margen de reserva operativa es menor al 6 por ciento". La demanda eléctrica superó ayer los 52 mil megavatios, rompiendo récords históricos.
La coordinadora general del Servicio Meteorológico Nacional (SMN), Alejandra Méndez Girón, ha advertido que la ola de calor inusual persistirá durante al menos dos días más. Se esperan temperaturas máximas superiores a los 45 grados Celsius entre miércoles y jueves en 12 entidades del país, entre ellas Nuevo León, Sonora, Sinaloa, Michoacán, Guerrero, Coahuila, Tamaulipas, San Luis Potosí, Veracruz, Tabasco, Campeche y Yucatán.
Los especialistas han indicado que, tras la declaración de alerta por parte de Cenace, es probable que los cortes programados de energía se intensifiquen y se extiendan para evitar un colapso total del sistema eléctrico, el cual podría llevar varios días en restablecerse.
"Se le pedirá a los grandes consumidores industriales de electricidad que apaguen sus plantas productivas para reducir la demanda eléctrica", señaló un experto consultado al respecto.
Sin embargo, los usuarios residenciales también podrían resultar afectados, como ya está sucediendo en Monterrey. En el sur de la Ciudad de México, por ejemplo, los vecinos han afirmado que prácticamente han estado viviendo con cortes programados durante los últimos cuatro días.
Asimismo, comercios, escuelas y hospitales públicos y privados, continúan experimentando una insuficiente provisión de energía eléctrica.
En lugares como Huetamo, Michoacán, donde las temperaturas alcanzaron ayer los 45 grados Celsius, la falta de luz ha persistido durante tres días. Muchas personas se ven obligadas a dormir en las calles sin servicios esenciales, mientras las tiendas y los cajeros automáticos permanecen cerrados y las clases han sido suspendidas.
Expertos han explicado que la demanda eléctrica ha superado la capacidad instalada del sistema y, además, la falta de inversiones en la infraestructura de distribución de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), que incluye redes de transmisión, subestaciones y transformadores, agrava aún más la fragilidad del sistema eléctrico en México.
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