La Fiscalía General de la República (FGR) ha iniciado una investigación sobre la presunta ejecución extrajudicial de cinco civiles en Nuevo Laredo, Tamaulipas. Estos hechos ocurrieron el pasado 18 de mayo y han sido motivo de preocupación tanto a nivel nacional como internacional.
CDMX.- La Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) ha anunciado su cooperación con la FGR para esclarecer las responsabilidades en este caso. Sin embargo, la Sedena ha afirmado que el material videográfico relacionado está "editado", sin proporcionar detalles adicionales al respecto.
En un comunicado oficial, la Sedena ha asegurado que no habrá impunidad en este caso y que no solapará a ningún miembro del Ejército que haya cometido una falta o delito. Además, ha informado que, paralelamente a la investigación civil llevada a cabo por la FGR, la Fiscalía General de Justicia Militar (FGJM) ha iniciado su propia investigación para esclarecer cualquier conducta delictiva en la que pudieran haber incurrido los militares mexicanos.
El video que ha sido difundido muestra aparentemente el incidente ocurrido en la ciudad fronteriza de Nuevo Laredo durante el día en cuestión. Según se puede observar en las imágenes captadas por una cámara de seguridad, los militares maltratan a los civiles y, supuestamente, los asesinan.
La secuencia registrada el 18 de mayo muestra cómo los militares sacan a los civiles de una camioneta, algunos de los cuales portan armas. Los soldados los despojan de sus armas, los golpean y los colocan junto a un muro. Posteriormente, en un momento extraño, los militares parecen refugiarse y, al mismo tiempo, disparan contra los civiles. Todos ellos mueren en el acto, a excepción de uno que fallece más tarde en el hospital, según informa el diario El País.
El video también muestra que los elementos castrenses alteran el lugar de los hechos, ya que uno de los militares utiliza una bolsa roja para recoger armas largas y evitar tocarlas con las manos, dejando así huellas, y las coloca junto a los cadáveres. Además, otro soldado se percata de que uno de los fallecidos todavía lleva esposas, las cuales, supuestamente, les habrían colocado los propios militares.
El oficial a cargo del convoy militar, el teniente de infantería José Luis N., presenta un informe detallado de lo ocurrido ante la Fiscalía General de la República. En dicho informe, el teniente afirma que él y sus hombres estaban desarmado a los civiles cuando estos últimos fueron atacados a tiros por personas que intentaban rescatarlos. Según la versión del teniente, los militares respondieron al fuego. Sin embargo, esta versión contrasta con el video, ya que en las imágenes no se observa ninguna otra camioneta civil cerca del lugar, ni se ve a nadie que no sea militar disparando. Aunque se aprecia que los militares buscan refugiarse, no se alcanza a ver si reciben disparos.
Estos hechos contradicen las declaraciones del presidente Andrés Manuel López Obrador, quien ha asegurado en repetidas ocasiones que durante su mandato no se cometen asesinatos a manos de las fuerzas armadas.
La FGR y la FGJM tienen la responsabilidad de llevar a cabo una investigación rigurosa para esclarecer los hechos y garantizar que se haga justicia en este caso de presunta ejecución extrajudicial.
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