Las elecciones del próximo 4 de junio en el Estado de México y Coahuila se encuentran en la recta final, y los sondeos electorales han generado controversias y polémicas entre los diferentes comités de campaña.

Cada partido interpreta los números según sus propios intereses y las encuestas que hayan pagado. De ahí que las tendencias generales que reflejan la mayoría de las encuestas revelan escenarios distintos.

En el Estado de México la candidata morenista Delfina Gómez parece llevar una dudosa ventaja. En Coahuila la Alianza Va por México parece tener una posición sólida.

Pero ante tanto manoseo de las encuestas, en ambas entidades las mediciones y estadísticas electorales no son determinantes. Serán los votantes quienes tengan la última palabra y definan el resultado final.

El panorama en el Estado de México

Las encuestas reflejan una modesta ventaja para la candidata morenista Delfina Gómez. Según quien haya pagado la encuesta, la ventaja puede llegar hasta los 10 puntos o más.

Por otro lado, los aliancistas afirman que su candidata, Alejandra del Moral, ha cerrado la brecha y se encuentra a menos de 5 puntos de su contrincante, hablando incluso de un "empate técnico".

El escenario en Coahuila

En Coahuila, la situación es menos discutida y los números de las encuestas parecen ser más claros. La división de Morena debido a la fractura provocada por Ricardo Mejía y el PT ha debilitado las posibilidades de la 4T de disputar la gubernatura.

Los sondeos más recientes indican una ventaja de hasta 16 puntos para el candidato de la Alianza Va por México, Manolo Jiménez, quien parece ser inalcanzable para el morenista Armando Guadiana, que registra un 34% de intención de voto.

A menos que ocurra un cambio drástico, en Coahuila las tendencias parecen ser favorables para la alianza opositora.

Los electores

Las encuestas han perdido seriedad. Así que, a pesar de las mediciones y estadísticas electorales, son los electores quienes tendrán la última palabra a través de su voto.

Factores como los votantes indecisos, el voto oculto y la movilización de estructuras partidistas durante la jornada electoral, van a incidir en los resultados finales.

Las tendencias estadísticas al final de las campañas han dejado de ser instrumentos de certidumbre. La decisión de los ciudadanos será determinante para definir quién ocupará la gubernatura en ambos estados y la integración del próximo Congreso local en el caso de Coahuila.

Horacio De la Cruz S. | Twitter: @hcsblog Asuntos de Estado