El senador Alejandro Armenta ha anunciado su decisión de presentar una denuncia penal en contra de la Ministra presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Norma Piña, luego de que ésta confirmara que los mensajes que recibió el legislador vía WhatsApp fueron de su autoría.

CD;X.- Armenta explica que su intención es proceder conforme a la ley, ya que considera que este asunto no se puede resolver de manera informal. Para él, se trata de un tema que va más allá de un simple intercambio entre personas, sino que vulnera y violenta la representación del Poder Legislativo, siendo una injerencia y una presión.

El senador poblano hizo referencia a la carta que la Ministra Piña hizo pública, en la cual reconoció que los mensajes polémicos fueron enviados por ella. Armenta manifestó que estará atento a la respuesta formal de la Ministra al escrito que le hizo llegar, en el cual le solicita aclaraciones sobre los mensajes.

Armenta considera que la confirmación de la Ministra Piña pone de manifiesto que los mensajes no son simplemente ofensivos, sino que buscan presionar e intimidar, y la mención de que la justicia llegará podría incluso ser considerada como una especie de amenaza. Es por ello que espera una respuesta formal a su escrito, basándose en los artículos sexto y octavo de la Constitución.

El senador subrayó que el nombramiento de la Ministra tiene su origen en el Poder Legislativo, ya que son los senadores quienes designan a los Ministros de la Corte, por lo que considera que los mensajes representan una injerencia y una presión que enfrenta al Poder del cual la Ministra misma surgió.

Ante la alegación de la Ministra de que sus mensajes no representan ninguna amenaza, Armenta insiste en que este es un asunto delicado que va más allá del género y no se trata de una cuestión entre hombre y mujer, sino entre el Poder Judicial y el Legislativo.

El senador Armenta considera que la carta de la Ministra Piña le permite demostrar frente a la opinión pública que cuando informó sobre este hecho no lo hizo como un mero espectáculo, a pesar de las críticas de algunos legisladores que no permitieron la defensa de la inviolabilidad del Poder Legislativo. Para él, esto no es una ofensa, sino una injerencia y una presión, así como una posible amenaza por parte de la titular del Poder Judicial hacia el presidente del Congreso.

Armenta concluyó afirmando que procederá conforme a la ley y que este asunto no se resolverá en una reunión informal, sino que debe ser resuelto ante la justicia. Lamenta lo sucedido y expresa su decepción por la confirmación de esta agresión al Poder Legislativo, ya que tenía dudas de que fuera la presidenta de la Corte la responsable de los mensajes.

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