Yo también creo que lo ocurrido en Segalmex, es un reflejo muy claro de lo que es la presidencia de México.

La paraestatal creada por iniciativa del presidente Andrés Manuel López Obrador para lograr la autosuficiencia alimentaria en los cuatro granos básicos de la dieta mexicana, ha estado envuelta en escándalos de corrupción desde sus inicios.

¿López Obrador no lo sabía? ¿Y si tenía conocimiento por qué tardó tanto en intervenir?

En los primeros dos años de su operación, la Auditoría Superior de la Federación encontró irregularidades por más de 15 mil millones de pesos, el doble de lo encontrado en la "estafa maestra" durante el gobierno de Enrique Peña Nieto.

La Fiscalía General de la República ha iniciado acciones legales contra los responsables de los actos ilícitos, pero se observa simulación más que un proceso de justicia en contra de la corrupción que ahí sucedió, operada por gente cercana a López Obrador.

De acuerdo con el periodista Raymundo Rivapalacio se especula que la Fiscalía está tratando de proteger a Ignacio Ovalle, el primer director de Segalmex, quien ha sido defendido por el Presidente.

También de acuerdo con Rivapalacio, el dinero sucio obtenido a través de Segalmex ha sido utilizado, supuestamente, con fines políticos con todo y que el secretario de Gobernación, Adán Augusto López, informó al Presidente poco después de asumir su cargo que la corrupción en Segalmex era alarmante.

Pero no se tomaron medidas. ¿Por qué? ¿Si las revelaciones de la prensa sobre la corrupción en Segalmex comenzaron en 2020, por qué casi tres años después inició la intervención de la autoridad judicial?

Desde la mañanera, cuando el presidente habló a favor de Ovalle, parecía estar protegido.

Y puede que así sea, porque tardaron dos años -después de las primeras advertencias formales de la Auditoría Superior-, para que fuera reemplazado por Leonel Cota.

A su relevo, Ovalle cayó parado. El Presidente lo nombró coordinador del Instituto Nacional para el Federalismo y el Desarrollo Municipal, adscrito a la Secretaría de Gobernación y le reiteró públicamente su afecto porque lo conocía “personalmente” y es “gente buena”.

Gente “buena” que (cuando menos) cerró los ojos frente al desvió de más de 15 mil millones de pesos.

Horacio De la Cruz S. | Twitter: @hcsblog