El linchamiento del joven Apolonio en Puebla es un hecho que ha conmocionado a toda la sociedad.

Es inaceptable que un acto de violencia tan desproporcionado se haya llevado a cabo por un robo de brócolis, lo que nos debe llevar a cuestionarnos sobre la calidad de vida y las oportunidades en nuestro país.

Es evidente que la pobreza y la necesidad son un problema en México, y muchas personas se ven obligadas a cometer delitos para sobrevivir. Pero la respuesta no puede ser la justicia por propia mano, ya que esto solo perpetúa un ciclo de violencia y deshumanización.

Es importante que las autoridades tomen medidas contundentes para garantizar la justicia y la seguridad de todos los ciudadanos. No se puede permitir que la impunidad y la falta de acceso a la justicia sigan fomentando la venganza y la violencia.

Es fundamental que se aborden las raíces del problema, se generen oportunidades para todos y se promueva la educación y el respeto a los derechos humanos. Solo así podremos construir una sociedad más justa y pacífica, donde los linchamientos y la violencia por propia mano sean una cosa del pasado.

Este triste suceso debe servir como un llamado de atención para reflexionar sobre el tipo de sociedad que queremos construir y para actuar en consecuencia.

regionglobal@gmail.com | twitter: @regionglobal | facebook: /regionglobal