Capufe opera autopistas como la México-Querétaro, México-Cuernavaca y Chamapa-Lechería, en tanto que Fonadin administra vías como la Monterrey-Nuevo Laredo. Pero el incremento afectará a las carreteras que ambos organismos administran.
La extensión carretera de nuestro país ocupa el lugar 18, pero en calidad, con base en el Índice Global de Competitividad del Foro Económico Mundial, hemos pasado del lugar 40 al 65 en lo que va de la presente administración.
Hace dos años que las tarifas carreteras oficiales no sufrían incremento alguno. De igual manera, la infraestructura carretera en México no ha experimentado una mejora significativa en los últimos años, no obstante sí existe inversión del gobierno y participación del sector privado en proyectos de concesiones carreteras.
La infraestructura carretera en México se compone de una red de carreteras federales, estatales y municipales, que superan los 370,000 kilómetros. La red de carreteras federales, que es administrada por la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), representa alrededor del 14% del total de la red y es responsable de la conexión entre los principales centros urbanos y las fronteras internacionales.
En 2021, el gobierno federal anunció un plan de inversión en infraestructura de transporte que incluye la construcción de nuevas carreteras, la modernización y ampliación de carreteras existentes y la mejora de la conectividad y la seguridad en las carreteras.
Sin embargo, la infraestructura carretera en México no ha experimentado una mejora significativa en los últimos años; los programas de inversión carretera del gobierno apuntan rezagos y a la participación del sector privado en proyectos de concesiones carreteras se mantiene estático.
Con el incremento de 15%, conforme a la inflación de 2021 y 2022, el Fonadin mejorará sus ingresos, pero si el rezago carretero se profundiza y la calidad sigue empeorando, es de esperar que la competitividad del país se atore con una pesada ancla.
Redacción: regionglobal@gmail.com
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