Anteriormente, la mayoría de las mujeres CEO lideraban empresas con ingresos más bajos al final de la lista. Sin embargo, ahora están abriéndose camino hacia las posiciones más altas. CVS Health, en el puesto No. 4, es la empresa de mayor rango dirigida por una mujer gracias a la llegada de Karen Lynch, ex presidenta de Aetna, como CEO en febrero.
Hasta este año, solo Ursula Burns, exdirectora de Xerox, había sido la única ejecutiva afroamericana en desempeñar el cargo de CEO en una empresa de Fortune 500.
En cambio, este año se unieron a ella dos mujeres: Roz Brewer, exejecutiva de Starbucks y Sam's Club, quien se convirtió en CEO de Walgreens Boots Alliance en enero, y Thasunda Brown Duckett, exdirectora de Chase Consumer Banking, quien asumió el liderazgo de TIAA en febrero.
Ambas mujeres han trabajado para abrir oportunidades a mujeres, especialmente mujeres de color, en sus carreras.
Duckett ha abogado por la inclusión de afroamericanos y personas de color en el sector financiero, patrocinando el programa Advancing Black Pathways de JPMorgan Chase.
Por su parte, Brewer ha exigido la diversidad en su equipo en Sam's Club y planea invertir en programas que desarrollen el talento de las comunidades marginadas en Walgreens.
En 2021, Fortune 500 ha incluido por primera vez datos sobre inclusión en su ranking para alentar a más empresas a informar públicamente sus cifras. Aunque más de la mitad de las empresas (262 de ellas) en Fortune 500 informaron algún nivel de datos sobre raza y etnia, sólo 18 empresas proporcionaron un desglose completo de su fuerza laboral estadounidense.
Los datos disponibles muestran que la representación de minorías en puestos directivos es baja, con solo el 5% de afroamericanos y el 6% de hispanos y latinos ocupando estos cargos en las 80 compañías Fortune 500 que divulgan esta métrica.
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